Cada vigésimo hombre sufría un ataque de gota. Los dolores son tan intensos que se comparan con una "agonía infernal". Aquellos que han experimentado este dolor al menos una vez, hagan una cita con un médico de inmediato y traten de seguir todas sus recomendaciones. En la etapa aguda, el descanso, el enfriamiento y los analgésicos ayudan. Pero los tratamientos tradicionales para la gota siempre se han basado en una dieta estricta. Las recomendaciones modernas no son tan categóricas. Los expertos dicen que no hay necesidad de una dieta especial. Los mismos principios generales de una dieta sana y equilibrada que son importantes para todas las personas se aplican a los pacientes. Sin embargo, es deseable comer menos alimentos ricos en purinas, porque a partir de ellas se forman microcristales que se depositan en las estructuras de los tejidos corporales.
El objetivo de la selección de la dieta es mantener los niveles de ácido úrico tan bajos como sea posible hasta seis miligramos por decilitro.
La alimentación sana es un pilar importante de la terapia y, en el mejor de los casos, ayuda a utilizar menos medicación. El médico debe controlar regularmente el nivel de ácido úrico en la sangre para estar seguro del éxito de la terapia.
- Menos purinas en los alimentos. Para aprovechar este consejo, debe tener una idea sobre el contenido de purinas en aquellos productos que se encuentran a menudo en el menú. Hay tablas especiales de nutrientes que deben usarse periódicamente. Estas tablas son de gran utilidad para los pacientes y son necesarias en la elaboración diaria de la dieta. Los pacientes no deben tomar más de 500 mg (miligramos) de ácido úrico por día y no más de 3000 mg por semana. En caso de un ataque, el médico a menudo prescribe límites superiores aún más estrictos: hasta 300 mg de ácido úrico por día o 2000 mg por semana. En cualquier caso, la dosis la establece el médico de forma individual y depende de la gravedad del proceso y del bienestar del paciente.
- Ingesta de líquidos. Los pacientes que sufren de gota deben prestar atención a la ingesta suficiente de dos a tres litros de líquido por día, a menos que existan contraindicaciones médicas. Puede beber agua del grifo y embotellada, café, agua mineral, infusiones de hierbas y frutas sin azúcar (al menos dos o tres litros al día). No se recomiendan los refrescos azucarados ni el alcohol.
- Restricción severa de alcohol. ¡Se requiere moderación extrema con las bebidas alcohólicas! El alcohol afecta el metabolismo y aumenta los niveles de ácido úrico. La cerveza (incluso sin alcohol) y el whisky son especialmente perjudiciales para los pacientes porque son ricos en purinas. Una copa de vino de calidad por día fuera del ataque es aceptable.
- Abajo los kilos de más La obesidad es un factor de riesgo importante para el desarrollo de hiperuricemia. Por lo tanto, la pérdida de peso debe ser un objetivo consciente del tratamiento; esto por sí solo puede reducir los parámetros de ácido úrico. Pero cuidado: el ayuno severo puede provocar un ataque de dolor e inflamación, por lo que está prohibido. El peso ideal debe lograrse gradualmente a través de mucho ejercicio y una dieta saludable y baja en grasas, con días de ayuno ocasionales. Es necesario perder peso con mucho cuidado, un máximo de un kilogramo por mes; de lo contrario, puede esperar un ataque de gota. La alimentación abundante es tan desfavorable como el hambre o los períodos prolongados de sed. Aquellos que sufren de gota deben tratar de evitar tales extremos.
- Dulce. Los estudios han encontrado que los azúcares simples son tan desfavorables para las personas con hiperuricemia como el alcohol. ¿Los pacientes con gota deben evitar las frutas y los jugos de frutas? No, dicen los expertos. Los pacientes deben incluso comer frutas para aprovechar sus propiedades positivas, pero no más de dos piezas por día (preferiblemente por la mañana). Deben evitarse las bebidas azucaradas y los jugos multivitamínicos endulzados con jarabe de fructosa. También en las barras de cereales, yogures rellenos, en cualquier helado y otros alimentos dulces, la fructosa suele estar presente y ¡debe ser consciente de ello!
- Café. Los efectos beneficiosos del café aún no se han investigado adecuadamente, pero la evidencia reciente muestra claramente que ya no es necesario prohibir el café en pacientes con gota.
Las disposiciones nutricionales más importantes para los pacientes con gota.
- menos carne: contiene purinas que se descomponen en ácido úrico, carne y salchichas un máximo de dos veces por semana, los despojos, el caldo, el extracto de carne, la carne de ave deben excluirse por completo;
- se deben evitar algunos tipos de pescado: coma uno bajo en grasa (alrededor de 100 g) y pescado de mar graso (alrededor de 70 g), excluya o consuma en pequeñas cantidades: sardinas, espadines, anchoas, crustáceos;
- se requiere moderación en el uso de legumbres (como guisantes, lentejas, frijoles blancos) y productos de levadura;
- prescindir del menú sin menudencias, embutidos, aves (especialmente su piel);
- el alto consumo de grasas es desfavorable, por lo que debe cocinar platos con un contenido mínimo de grasas, sus productos de descomposición ralentizan la excreción de ácido, debe tener cuidado con los embutidos grasos, las carnes grasas y los quesos grasos;
- asar a la parrilla, al vapor, cocinar en papel de aluminio, una olla de barro o una sartén con un recubrimiento especial son ideales;
- buenas fuentes de proteínas son la leche, los productos lácteos y los huevos, tan solo 250 ml de leche desnatada o yogur natural al día ayudan a eliminar el ácido úrico;
- no excluya verduras, ensaladas, papas, algunas frutas, solo limite su uso;
- recuerda que la vitamina C tiene un débil efecto reductor del ácido úrico;
- la carne se hierve mejor: durante la cocción, las purinas se liberan parcialmente en el caldo, que se drena, luego la carne se puede usar por separado.
Últimas recomendaciones dietéticas para la gota
Recientemente, los médicos no insisten en una dieta estricta. Su breve consejo es que la alimentación debe ser completa, variada, pero evitando los excesos. Las recomendaciones para las personas con riesgo de gota siguen siendo las mismas: comer menos alimentos ricos en purinas, como reducir el porcentaje de carne, vísceras o mariscos en la dieta. Pero, en general, las recomendaciones nutricionales no son dietas específicas, sino lo que se le puede recomendar a alguien como una dieta sana y equilibrada.
Los médicos han llegado a la conclusión de que es necesario volver a evaluar las purinas de los alimentos vegetales. Más recientemente, se dijo que la saturación de purinas de las espinacas y las coles de Bruselas las convierte en alimentos desfavorables. Investigadores de EE. UU. han demostrado que estos componentes no provocan hiperuricemia con una dieta equilibrada. Por lo tanto, no hay razón para rechazar el apio, la coliflor, etc. Debido a la riqueza de sus proteínas y otros ingredientes únicos, es más probable que tengan un efecto positivo en el metabolismo.